Sin una razón de peso, estos días he
estado obsesionado con buscar información alrededor del número 30.
Un número que es esférico, harshad y el número Guiga más pequeño, ( no está mal para empezar ).
En Astrología, el círculo con la
configuración del cielo y los planetas consta de 360º divididos en
12 signos de 30º. Para los Árabes este número equivalía a Lam, en
Hebreo es Lamed y en Griego Lambda, que corresponde con nuestra L, (
la inicial de mi segundo nombre ).
El calendario musulmán, se basa en
ciclos lunares de 30 años. Y pese a que en la Edad Media, se
consideraba un día malo y peligroso, ya que era cuando los usureros
cobraban sus intereses, con respecto a la edad, 30 años pueden dar
para mucho:
Con 30 años, Julio César fue elegido
cuestor de los Comicios. Cumplía 3 decenas Miguel Ángel,
cuando en 1496 decidió partir para Roma, donde fue acreditado como un
artista de primera línea.
Ivan III de Rusia, más conocido como
El Terrible, sufrió la pérdida de su mujer, suceso que le volvió
loco, cuando apenas había cumplido 6 lustros.La misma cantidad de
años durante los cuales Isabel La Católica gobernó como reina de
Castilla.
El Monasterio de El Escorial siempre
será un símbolo de la victoria española en la Batalla de San
Quintín. Con esa intención lo mandó levantar Felipe II a sus
treinta años.
Había cumplido tres décadas el
talentoso Beethoven cuando presentó la Primera Sinfonía. La misma
edad con que Mozart estreno la archiconocida obra “Las Bodas de
Fígaro”.
Los Episodios Nacionales significaron
una manera de entender la memoria histórica de los españoles de la
época. El genio Benito Perez Galdos los comenzó a publicar cuando
le contemplaban 30 primaveras.
No necesitó más que 30 años el gran
Napoleon para perpetrar un golpe de Estado, que le convirtió en
Primer Cónsul de la República.
Esa proeza debió motivar a Jacinto
Ruiz y Mendoza, héroe poco reconocido de la Guerra de la
independencia, que a la misma edad que el “emperador”, participó
en el Levantamiento del 2 de Mayo.
Esa costumbre provocó que con 30 años,
Fernando VII promulgara el decreto que restablecía la monarquía
absoluta y declaraba nula la Constitución de Cadiz.
A la aún no mencionada edad de treinta inviernos, era elegido miembro de la Royal Society, Darwin con la publicación de su obra Diario del viaje de Beagle.
El autor de la gran obra de Los
Miserables, Victor Hugo, era treintañero cuando fue elegido senador
y profundo militante en favor de la amnistía.
La creación de la empresa Bell
Telephone Company fue un hito en el mundo de la comuniciaciones, sólo
tenía treinta años Grahan Bell cuando se fundó.
Sorprendentemente, la insatisfacción
de un conservador, y su atracción por el Partido Liberal, hizo que
después de un receso en el Parlamento inglés, cruzara la sala y se
sentara en la bancada de los liberales. Sólo tenía 30 años y se
llamaba Winston Churchill.
J.F kennedy cumplía 3 décadas cuando fue asignado como nuevo representante por el estado de Massachusetts en la Cámara de
Representantes.
A sus treinta primaveras, otro John,
John Lennon se separaba de The Beatles. Lo hacía de forma
voluntaria, a diferencia de Steve Jobs quien, con la misma edad fue
despedido de la compañía que el mismo fundó, Apple y creó NeXT
Computer.
Pero no sólo son personajes los que
han revolucionado a sus 3 decenas. El protocolo TCP/IP puede celebrar
este mes, que acaba de cumplir treinta años como herramienta global
de la Red.
Decía Johan August Strindberg que
cuando
se tienen veinte años, uno cree haber resuelto el enigma del mundo;
a los treinta reflexiona sobre él, y a los cuarenta descubre que es
insoluble.
Pero
parafraseando a Groucho Marx, debo confesar que nací a una edad muy
temprana.