Cuentan que un
día el descubridor de Lola Flores llamó a un amigo diciéndole: “He
visto a una artista que no sabe cantar, no sabe bailar y ni siquiera
es guapa, pero es lo mejor que he visto nunca en un escenario”.
Esta curiosa
anécdota se podría extrapolar a la figura de Steve Jobs: No fue un
gran técnico, no tenía conocimientos de marketing, no sabía de
dirección de empresas, ni era una persona agradable, tampoco inventó
nada, ( ya existía el mp3 cuando apareció el ipod, y el móvil
cuando llegó el iphone... ), pero se le puede considerar como uno de
los mejores y mayores innovadores y visionarios de la última mitad
de siglo.
Sin embargo,
después de haberme leído la gorda biografía escrita por Walter
Isaacson, me he quedado con tres ideas principales muy útiles, ( al
menos como reflexión y análisis ), en este mundo empresarial y
tecnológico.

La segunda se
llamaría: No división dentro de la empresa. Aún
recuerdo la vez que fui a una reunión en la sede de un importante y
conocidísimo imperio del mundo de la comunicación. Nunca olvidaré
esa federación de federaciones en las que todos discutían con
todos, temiéndome que pudiesen llegar a las manos, sin duda una de
las causas de su actual declive. La empresa fundada por Jobs, motiva,
o mejor dicho obliga a que todos los departamentos luchen, peleen, y
remen en la misma dirección y en pos de los objetivos principales de
la empresa. Lógico verdad? Pues resulta sorprendente lo poco que se
aplica en muchas de las compañías actuales. Puede que al final no
sea tan buena idea “Divide
et vinces”.
O al menos sin una cultura de dividir
tareas para unir el trabajo.
La última y más
apropiada es: No al miedo a devorarse. La
empresa Sony no quiso, en su momento, crear un mp3 por miedo a ver
reducida su venta de cd's. Al final si no te devoras a ti mismo te
terminarán devorando otros. La
necesidad de evolucionar provoca sacrificios que exigen caminar hacia
delante. La venta de
iPhone mermó a la de iPods, la de iPad a iMac, pero da igual. Como
escribí en otro post, el mundo de la tecnología es una cinta transportadora, quedarte parado, en posición defensiva, es
retroceder.
En
definitiva, una historia curiosa sobre un personaje que tuvo como
máxima: “Tu
tiempo es limitado, de modo que no lo malgastes viviendo la vida de
alguien distinto.”